La llegada - Erster Tag

Tübingen - Samstag, 28 Oktober 2006

Cuando uno sale de viaje (aunque no siempre) es para llegar a algún sitio: Destinación Tübingen - Stuttgart - Baden Württemberg. Y aqui me encuentro, con miedo de frío y pánico idiomático... Por el resto, creo que perfecto sería un adjetivo justo.

El viaje, en Lufthansa, al menos podría calificarlo de curioso, para recordar. Me dan la targeta de embarque en El Prat y mi asiento está en la fila 5... o la Economy Class de Lufthansa es muy extensa o me han puesto en business.... primer golpe de suerte pensé. La realidad es que por primera vez en mi vida vuelo en un Bombardier. Lo que traducido a números sería un avión de unas 15 filas de asientos, o sea: 60 pasajeros a lo sumo. Con razón no hay business. Este LH4499 destino Stuttgart es el avión más enano en el que he volado en mi vida. A pesar de ello, vuelo plácido, sandwich de queso y Coca-Cola Light. El que se sienta al lado no me habla y me mira de reojo... quizás ha tenido una mala experiencia en Barcelona con los catalanes. Como siempre... cierro La vanguardia y me entrego a Morfeo... en 1 hora más pisaré destino.
Me despierto, llegamos y desde la sala de equipajes ya la veo esperándome.... empieza la aventura!!
Aeropuerto de disenyo, McAuto en el parking del aeropuerto, VW Polo, Autovan, Tübingen y ya estamos en casa. La mejor de las acogidas y visionado de planes para los próximos días. Esta noche nos quedamos en casa.

Después de una noche no muy fría, nos despertamos perezosos y con ganas de improvisar el día. Pretzels (premio de plata de la asociación de alimentos en Germany), süßes stückle, hefeknoten y café para desayunar-comer. Luego, camino al centro.

Si lo he de definir en una palabra, precioso quedaría corto. Es de esas ciudades que te cautivan paso a paso. Ojos abiertos y preguntas por todo. Cuando quieres entender algo, me ensenyó la vida que debes mirar con ojos de ninyo. Así es mi visita al centro histórico de Tübingen. Tiendas pequenyas y especializadas: Cuantas tiendas sólo de calcetines conocéis?, lo mismo con gorros, relojes, alfombras, y un sinfín más... Casas de estudiantes (todas con su bandera), universidades, plazas, agradables cafés, bares y la sensación de encontrarte en el epicentro de la vida social y cultural de alrededores. La gente es joven, el suelo empedrado, bicis arriba y abajo, casas con bigas de madera y construcciones típicas de cualquier história del mediévolo en el cine. Aire limpio, calles impolutas y la sensación de que aquí no hay nada que no esté en sus óptimas condiciones.
Tomamos un café en el Tangente Jour y de vuelta compramos la cena y algunas cosas más. Sin palabras para el supermercado. Si las calles son ordenadas os podéis imaginar el resto.
Para la noche, el plan pasa por Stuttgart. Theodor Heuss, bares, Currywurst, algunos locales de moda, Marreike y de vuelta a casa.
Manyana os cuento la noche suebia.

Balance:
> Manta y nórdico para dormir (y no hace frío)
>Cuello alto de lana y americana de pana de día
> Capuccino y Kaffe Großen tasse : 5,50€
> Estar aquí realmente no tien precio.